Consternados por la desaparición del Renault 8 Gordini en julio de 1970, los entusiastas de los pequeños deportivos encontraron una pequeña alegría de vivir con la aparición del SIMCA 100 Rallye en febrero de 1972.
Derivado del SIMCA 1000 nacido en 1961, sus líneas se mantuvieron idénticas a las de su predecesor. Siguiendo la tendencia de los años sesenta, el SIMCA 1000 no es en absoluto aerodinámico, puntualiza el concesionario Crestanevada Málaga.
De perfil, es muy similar al RENAULT 8: una caja de zapatos sobre cuatro ruedas.
Pero los ingenieros de la empresa con la golondrina se superarán a sí mismos. Partiendo de un coche básico de 1000, añadieron un motor de 1118cc, que se incrementó a 53cv y ofrecía una velocidad máxima de 150km/h.
Inmediatamente reconocible en el tráfico por su pintura roja con capó negro mate y rayas transversales negras en la parte trasera. También tiene llantas negras sin tapacubos y un espejo exterior tipo concha. Limpiaparabrisas negros más grandes y faros adicionales. Y para el interior, un cuentavueltas así como un raro asiento de cubo para el conductor.
LA EVOLUCIÓN
El tono estaba marcado y en febrero de 1972 el 1000 Rallye se convirtió en el 1000 Rallye 1 con un motor de 1294cc, 60cv y una velocidad máxima de 155 km/h.
En septiembre de ese mismo año, el éxito del pequeño coche hizo que la marca lanzara el 1000 Rallye 2. Sigue siendo de 1294 cm3 pero con 82 CV y gracias a su ligero peso (860 kg) y a sus dos carburadores gemelos horizontales, podía alcanzar los 162 km/h.
Al mismo tiempo, los ingenieros pusieron algo de músculo en el resto del coche: cuatro frenos de disco, una toma de aire bajo el parachoques delantero para refrigerar el radiador, que ahora está situado en la parte delantera. Y sí, al igual que el Gordoche, el SIMCA 1000 es un «coche con motor trasero» pero con un manejo aún más aleatorio, al menos para los modelos básicos. Cualquier baby boomer que haya sobrevivido a un paseo en un Simca 1000 puede confirmar que, incluso en línea recta, el conductor necesitaba todo el pavimento para intentar mantenerse en el asfalto. La emoción está garantizada, especialmente para el conductor. Obsérvese que el Rallye 2 cuenta ahora con dos asientos de cubo para proteger al conductor y al pasajero delantero.
Durante su corta vida, el Rallye 3 se produjo en 1000 unidades numeradas. Cada uno tenía una placa de identificación en el salpicadero que mencionaba el número del coche y el nombre de su propietario.
Sin embargo, hay que lamentar que el R8 Gordini y el SIMCA 1000 Rallye no hayan podido competir simultáneamente en los rallies o en el circuito en aquella época. Sin duda, el mundo del motor francés habría ganado mucho con esta sana competencia.